Hoy, 22 de abril de 2022, celebramos en mi colegio el Día del libro. Una fecha importante para todo profesor de Lengua y Literatura con un mínimo de vocación porque, en este día, afirmaciones como la de "He venido aquí a hablar de mi libro" tienen más sentido que nunca.
Pero, centrándonos en el tema que acomete hoy mi reflexión, he decidido escribir este artículo porque hoy realizo una actividad para este Día del libro con mis alumnos de Bachillerato en la era de Postear, sed los "jueguitos", de los "papi", Motomamis y Tik Tok. La era en la que el libro más vendido posiblemente sea algo escrito por María Pombo, la era de los influencers y de la cultura de la inmediatez; del individualismo (DRAMA)
La tarea que les he planteado a mis alumnos es que tenemos (sí, me he incluido para que todos dejen la vergüencita tonta a un lado) que hacernos pasar por un autor o autora cuya obra literaria haya marcado nuestra trayectoria humana. En mi caso, la elección ha sido bastante difícil “¿ Con qué autor me quedo?” Pensaba ayer. Todo eran dudas y nada me convencía.
Por suerte, las Musas me visitaron esta madrugada y he despertado decidida a elegir a Sally Rooney y su novela Gente normal para, de paso, hablar a mis chicos de la importancia de buscar en su camino de la vida relaciones amorosas sanas, que aboguen por el su crecimiento personal y grupal, relaciones que hagan mejores a cada uno de los implicados, relaciones como las de Connell y Marianne.
Tras haber elegido esta novela, me he dado cuenta de que nunca he mencionado nada de ella por estos lares... ¿Cómo he podido con todo lo que he aprendido leyendo entre sus páginas? Espero que mis chicos se animen a describir el significado que esta irlandesa da al amor; un amor que no limita, que no corta, si no que abre, amplia y aumenta.
Aunque hasta mañana no podamos hablar oficialmente del Día del libro, no dejéis de leer esta maravilla independiente de vuestra edad. Sus páginas tienen demasiada verdad.